Paula Rosales *

Latinoamérica está despertando de un largo letargo. Lo vemos en el rostro curtido por el sol de sus poblaciones, como una herencia de generaciones de jóvenes que buscan oportunidades y que luchan contra las injusticias, lo vemos en los gobiernos y sociedades cercanos a los menos favorecidos, pero también lo vemos en iniciativas como Asuntos del Sur.Asuntos del Sur es un tanque de pensamiento que busca crear una red de hermandad desde los áridos desiertos de México hasta la Tierra de Fuego para analizar la compleja y variada realidad de nuestro continente.Perú, Bolivia, Colombia, Nicaragua, El Salvador, Chile y Argentina fueron los destinos de la última gira de Asuntos del Sur, con la que buscan fortalecer el papel de los liderazgos ciudadanos en cada uno de los países.Como salvadoreña me sorprendí que mi país estuviera dentro de las naciones seleccionadas entre toda la región, sobretodo porque creí que era una iniciativa solamente para países del Sur, pero con entusiasmo me di cuenta que aún nos reconocen en el mapa.Con el lema de Mucho con Poco, pudimos conocer junto a diferentes representantes de organizaciones sociales salvadoreñas diversas herramientas tecnológicas y académicas que nos facilitaran la labor de difusión en cada una de nuestras iniciativas.De El Salvador -llamado por la poetisa Gabriela Mistral, el Pulgarcito de América por sus escasos 21 mil kilómetros cuadrados de territorio- podría contarles que es un empobrecido país, con una de las tasas más grandes de sobrepoblación, tenemos una baja tasa de crecimiento económico.Además tenemos una patria peregrina, más de tres millones de salvadoreños que fueron expulsados debido a una guerra civil (1980-1992), que dejó un saldo de 75 mil muertos y que destruyó el tejido productivo. Otros tantos huyeron en la post guerra por la falta de oportunidades.Nuestro país también comienza a despertar. Tenemos un territorio que comienza a florecer, ancianos que comienzan a escribir, obreros que construyen con más fuerza, los niños dejan de estar desnutridos, se exige una transparencia gubernamental.La sociedad cada vez es más crítica, más participativa, más democrática, ahora somos más que una mala noticia que circula en el mundo, somos un pueblo que aprende todos los días a caminar.Nuestros problemas, como en el resto de Latinoamérica, son grandes y complejos. Hay que enfrentarse a grandes monstruos, pero afortunadamente tenemos un poco de energía, de fe, de fuerza, de unión, de amor, de fraternidad, haremos mucho con poco.Que El Salvador haya sido tomado en cuenta por Asuntos del Sur en esta innovadora propuesta no es casualidad, nos merecemos ver un horizonte más allá del que ya vimos, la grandeza de Latinoamérica es su gente, la que se une, camina y lucha por una transformación social, el camino ya inició. El Salvador también es el Sur.*Paula Rosales es periodista salvadoreña colaboradora de las revistas ContraPunto y OperaMundi (Brasil). Es Directora de la organización Red Ciudadana y participó de los Talleres Mucho con Poco en El Salvador.